LA GUERRA CIVIL
El siglo XIX se cerró en
toda Europa en un contexto
de desazòn y malestar; en Espa a esa crisis empeorò
con el desastre de
1898 : la pèrdida de sus
ùltimas colonial americanas (Cuba y Puerto Rico) y Filipinas,
y como consecuencia su
prestigio internacional. Por conseguiente,
el siglo XX se abriò con
una gran incertidumbre que abarcaba la sociedad, la economìay sobre todo la polìtica, ya que el
paìs se encontraba en una situaciòn de grave atraso en comparaciòn con los demàs paìses europeos.
Estas crisis desembocò en la primera dictatura espa ola con el general Miguel Primo de Rivera, cuyos
intentos de reformas fracasaron en pocos a os Tras las elecciones municipales en
1931 con el triunfo de la izquierda
y el etusiasmo popular se proclamò la Repùblica el 14 de abril. Se intentaron poner en marcha varias reformas para la modernizaciòn
del paìs pero las reacciones contrarias de
borgueses, ejèrcito e iglesia provocaron una alternancia en el poder del gobierno
entre la derecha y la izquierda ;
en unos cinco aῆos se efectuaron tres elecciones, entre persecuciones, represalias y violencias callejeras. Mientras tanto, se iban formando los partitos polìticos de la Phalange
Espaῆola (nacionalista
y antimarxista, inspirada
en el fascismo) y el Frente
Popular, partido de la izquierda. La situaciòn se precipitiò en julio de 1936. En las primeras horas del 17 de julio, en Melilla, contra el gobierno republicano
se produjo el alzamiento militar que, pro el general Francisco Franco, se fue extendiendo por toda Espa a en pocos dìas,
dando inicio a la Guerra Civil.
El alzamiento francasò en Madrid y Barcelona,
pero se afirmò en Galicia, Leòn, Navarra, parte de Aragòn y Andalucìa, Baleares y Canarias. Los nacionales o fralangistas fueron apoyados por la borguesìa, la iglesia y, desde el extranjero, por Alemania e Italia, rientra los republicanos recibieron ayuda de Rusia y voluntarios de diversos paìses que formaron
las "Brigadas Internacionales". En 1937 los nacionales conquistaron el norte y el
bombardeo sobre Guernica
mostrò toda la fuerza de la
aviaciòn alemana, conviertiendo el ataque en el sìmbolo
del horror de la guerra civil espa ola gracias al cèlebre
cuadro de Picasso, Guernica. En 1938 los nacionales
llegaron al Mediterràneo y
la batalla del Ebro fue la màs sangrienta de toda la guerra. Al a o siguiente, tras conquistar Barcelona y Madrid, Franco anunciò
victorioso el final de la guerra. Los problemas
decisivos que llevaron a la derrota
repubblicana fueron la carencia
de un lìder y la incapacidad
de coordinar la acciòn de sus
militares. La guerra tuvo desde el principio implicaciones internacionales:
Hitler y Mussolini encontraron en Espa a un campo de experimentaciòn
para sus sistemas bèlico, por eso enviaron a Franco ayudas concretas (soldados, armas y materiales). El general Francisco Franco impuso en Espa a la dictatura abriendo un perìodo oscuro en la historia del paìs que viviò un aislamiento
total internacional de caràcter
polìtico, economìco y
cultural. Sòlo con el reconocimiento del Règimen por EE.UU. y el Vaticano en 1953 y tras la entrada en la ONU del paìs en 1956, el sistema econòmico esperimentò unos progresos: la importaciòn permitiò modernizaciòn de las empresas y el fenòmeno del turismo ampliò el mercado interior.
Es el perìodo
que suele denominarse "el milagro econòmico espa ol ».
Sin embargo, el modelo polìtico de Franco se mantuvo pràcticamente sin modificaciones entre 1939 y 1975. Sòlo la muerte del general, el 20 noviembre de 1975, y el nombramiento de Juan Carlos I
de Borbòn como Rey de Espa a marcaron el
principio de la recuperaciòn de las
libertades por el pueblo espa ol